¿Cómo estudian los historiadores la historia? ¿Por qué necesitan estudiar geografía?

A mi entender, los historiadores estudian la historia de una manera muy diferente a cómo la aprenden los no historiadores, es decir, casi científicamente.

La mayoría de nosotros consumimos historia: aprendemos sobre egipcios y pirámides, romanos y caminos, reyes y reinas, un poco de esto y un poco de eso (la única calificación formal que tengo es una O-level en la historia social y económica del Reino Unido 1750–1900).

Un historiador real tomará las cuentas contemporáneas (a menudo en conflicto) junto con otras fuentes en un esfuerzo por determinar qué estaba sucediendo exactamente. Por ejemplo, si están interesados ​​en las actividades del Imperio Romano, pueden leer el trabajo de Caesar y tomarlo con una pizca de sal de la misma manera que leen el relato de Churchill sobre WW2 (la historia de cómo un hombre solo) Ganó la guerra (es broma, es excelente, pero tómela con una pizca de sal).

Da la casualidad de que las dos obras que he mencionado son las del Rin. Los ríos, mares y cordilleras tienen un efecto obvio en el resultado de los acontecimientos, tanto en la guerra como en el comercio.

Así como los científicos estudian las matemáticas (tanto puras como aplicadas), tiene sentido para los historiadores estudiar algo de geografía (tanto física como humana), como ya se ha dicho.

Muchos historiadores estudian geografía es mostrar conexiones entre personas y lugares. Porque la geografía afecta a la historia. La ubicación de los ríos y montañas, el clima de un área, los tipos de plantas que se encuentran en un lugar, donde se encuentran los recursos y otros problemas geográficos determinan cuándo las personas van a un lugar, desarrollan algo o hacen que algo suceda.

La arqueología se puede utilizar para estudiar los períodos históricos y prehistóricos del pasado humano. Los métodos arqueológicos se pueden usar para producir interpretaciones basadas en la evidencia, que pueden llenar áreas, no tocadas por registros históricos, como la vida de los más pobres. A veces, se puede utilizar para desafiar interpretaciones históricas. La historia, después de todo, está escrita por el vencedor.

La prehistoria abarca la vasta suma de la existencia humana, para la cual no había registros escritos. No historia. En este caso, los arqueólogos y antropólogos pueden ofrecer nuestra única comprensión a través de sus interpretaciones basadas en la evidencia.