¿Es el sistema educativo coreano un ejemplo de éxito y desarrollo?

Solo con los números, el sistema educativo surcoreano es uno de los más exitosos del mundo. Sin embargo, el éxito del sistema es cuestionable cuando se trata de la moral del estudiante. Debido a que los coreanos esperan que sus hijos obtengan buenos empleos y apoyen financieramente a sus padres en la vejez, la presión para que les vaya bien en la escuela y asistir a una universidad de prestigio es alta. Para asegurar su éxito, muchos padres envían a sus hijos a academias privadas caras después del horario escolar. Esto significa que los estudiantes en edad de escuela primaria y secundaria que tienen el mejor rendimiento académico a menudo pasan más de 12 horas por día en un aula, 5 o 6 días a la semana, además de estudiar intensivamente fuera de clase. Por cierto, Corea tiene una de las tasas más altas de suicidio entre adolescentes en el mundo, con “calificaciones” comúnmente citadas como la causa. Así que la respuesta a la pregunta realmente depende de la definición de éxito de uno.

Una visión general de la educación en Corea del Sur

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Tengo sentimientos encontrados. Los estudiantes aquí tienen disciplina y buenos hábitos de trabajo durante largas horas y al estudiar en un sistema altamente competitivo y enfocado en respuestas rápidas y correctas. Es un sistema respaldado por una cultura bastante tradicional que respeta y exige logros educativos. No hay días de enfermedad. Tienes tu trasero en ese autobús, todos los días.

Donde está más débil es en su enfoque en prácticas pedagógicas algo anticuadas (memorización y recuerdo) que producen muy buenos drones de oficina pero hacen un mal trabajo en la enseñanza de habilidades independientes de resolución de problemas o razonamiento creativo. Los estudiantes son expertos en recordar el conocimiento, pero no en sintetizarlo o evaluarlo. Muchos sobresalen en la habilidad de escribir exámenes en sí mismos, no en las ideas que los exámenes miden. Acumulado en esas largas horas es una gran cantidad de tiempo de asiento haciendo poco de valor, o dejando de fumar a escondidas.

Esto puede cambiar, y los coreanos son cada vez más conscientes de estos problemas. Además, en comparación con las aulas abarrotadas y tecnológicamente estériles de hace unas décadas, el sistema está mejorando y es probable que continúe haciéndolo.