Cómo hacer que mi hijo tenga interés en los estudios.

Odiaba la historia hasta que fui mayor y comencé a viajar. Se convirtió en algo divertido cuando pude sentarme en un lugar, y saber que hace 200 años los hombres se estaban muriendo a mis pies, o que estaba sucediendo una gran cosa en el lugar donde me encontraba. Lo mismo sucedió con el álgebra. Creo que tenía 30 años cuando me encontré usándolo para resolver un problema, estaba tan emocionado.

Como padre, a veces tienes que hacerlo divertido o gratificante. Recuerdo un viejo programa de televisión “Andy Griffith” en el que su hijo y sus amigos se quejaban de la nueva maestra “Old Crump” y de lo aburrida que era la historia. Andy se equivocó y estuvo de acuerdo con ellos y casi perdió a su pronto para ser gal.

Una vez que se dio cuenta de su error y descubrió que ella era sexy, les contó a los niños una historia sobre el mismo momento en la historia en que la maestra estaba enseñando, adornada con todas las cosas que les gustan a los niños (pelear y matar, y demás). Lo siguiente que sabes es que los chicos tenían un club de historia y Andy tenía una nueva chica.

Como padre, ninguno de los que saben exactamente funcionará. Use todos los recursos que pueda, vea lo que funciona para otros y siga intentando. Tarde o temprano, algo de eso se pegará.

Ese episodio del “Show de Andy Griffith”, por cierto, fue el episodio 23 de la temporada 3.

Los estudios se vuelven aburridos cuando no hay interés en ellos.

Si desea crear interés para los estudios, primero debe contar algún dato interesante sobre cada tema.

Dígale a su hijo de acuerdo con su método favorito o sus gustos.

Relacione sus temas con las historias, dibujos animados … Haga historias … Haga preguntas y genere entusiasmo para el estudio

Hazlo tan competitivo para él que siempre trate de ganar …

Dale la tarea que debe hacer, desafíalo … Y finalmente, logra su objetivo y no olvides darle una recompensa.

Los estudios siempre necesitan concentración, emoción, naturaleza curiosa para saber todo.

Todo lo mejor.

Al igual que un profesor, tienes que hacerlo divertido. Muéstrale cómo se relaciona o ayuda en el mundo real. Siéntate y hazlo con él. Pregúntele cómo fue el día escolar y entabla sinceramente esa conversación. Para castigarlo / disciplinarlo, no le diga que vaya a leer un ensayo y un libro. (Esto muestra / enseña a los estudiantes que la educación es un castigo y no debería gustarte)

Al hacer lo anterior, le está mostrando a su hijo que encuentra interés en su educación. Es interesante para usted, por lo que también debería serlo para él. Mostrar que su hijo aprende es divertido y puede ser más que solo notas, exámenes y calificaciones.

¡La participación de los padres es enorme!